viernes, 29 de febrero de 2008

Mapa sanitario del mundo


En esta imagen, elaborada por la ONG Médicos del Mundo, se puede observar el número de habitantes por médico existente en cada país del mundo (pinchar para ampliar).

Quisiera llamar la atención sobre un detalle. Busquen Cuba. Observen la cifra: 170:1, es decir, ciento setenta habitantes por cada médico. Estados Unidos tiene 390 o 470, según el Estado. Europa oscila en torno a 300 y África tiene el espeluznante dato de 30.000 y hasta 50.000 residentes por cada médico.

Poco se puede decir sobre este dato, que no salte por sí solo a la vista. La sanidad en Cuba es pública, como todo el mundo sabe. Ninguna persona tiene que pagar un céntimo al doctor para acudir a ella, y ello no hace ineficiente al sistema. Es el país, además, con el menor índice de mortalidad infantil, según datos de la ONU.


Cuba no es un paraíso. No existen los paraísos en la Tierra, sólo existe tierra en la Tierra. Pero reconozcamos las cosas buenas que, sin duda, tiene el modelo cubano.

jueves, 28 de febrero de 2008

La farsa electoral

Obtenido de http://www.ciudadano.eu/, blog de Jorge Verstrynge, ex-secretario general de Alianza Popular y actualmente profesor en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense de Madrid.

(1) Elecciones: alegría, alegría…

Todo es relativo. En las elecciones también .Las elecciones dan varios motivos de alegría:

1.- No hay elecciones, ni en las monarquías absolutas ni en las dictaduras (sean ambas” por la Gracia de Dios” o no). En eso las elecciones son buen síntoma…

2.- En donde hay campañas electorales, hay mejoras. Nos prometen pluses de todo tipo y rebajas de impuestos, menos abusos (pero otros impuestos y abusos nuevos vendrán…), menos dirigentes inútiles (pero, habitualmente, serán sustituidos por otros equivalentes).
Esa competición, rivalidad, esfuerzo por ganarse al pueblo que son las elecciones, puede incluso provocar también hilaridad: “Yo con Don Mariano, detrás de Don Mariano”, el cual “ossch… promete a todoshss beshoss y queshoss”; “Mi talante os traerá ahora lo que debió traer hace ya tiempo”; Tal o cual Autonomía “avanzara hacia el autogobierno, la independencia… dentro de cien años”, etc.
Pero ¡que contentos se ponen los ciudadanos! Cuando (como en algunos países) el día de votación es declarado festivo; y también se alegran los candidatos, diputados, el día de la votación: ya no tienen que esforzarse, agotados que están ellos de haberse tenido que dedicar a trabajar su electorado/circunscripción durante 90 días tras 45 meses de tocamiento de bolongos). Alegría esta que comparten también las agencias de publicidad: van a poder cobrar de los partidos o al menos, eso creen, y también las imprentas, las emisoras de radio y las televisiones (preparando las facturas por carteles, folletos, trípticos, panfletos varios, anuncios radiados y televisados, etc.), los periódicos y periodistas que han aceptado sobres para “orientar” la información de campaña… Y también se alegran los que dominan el Sistema, maravillados de vernos agitarnos inútilmente, como hormigas en un frasco de cristal cerrado a cal y canto…
Cerrado porque las elecciones sirven para muchas cosas excepto, como ha demostrado mi amigo Bernard Manin (del “Institut d’Etudes politiques” de Paris, autor de una obra magnifica titulada “Principios del Gobierno Representativo” y traducida al español -se descuidaron los censores-), para que el Pueblo pueda gobernar directamente: de lo que se trata es de que el pueblo “gobierne” a través de representantes, es decir delegue su poder; es decir que no lo pueda ejercer por si mismo…, que deje a otros gobernar en su lugar.

(2) “Elections: ¡piege a Cons!” (o sea “Elecciones: trampa para gilipollas, o bien la descripción de una fantasmagoría).

1.- Si Democracia es poder del pueblo, para el pueblo, pero sobre todo por el pueblo, entonces el sistema parlamentario de Gobierno (me resisto a llamar a eso democracia) no es democracia; ya lo explicó Rousseau: delegar la parte de soberanía popular que ostenta cada ciudadano es renunciar a ella mientras dure la delegación. Por lo demás, es evidente que durante la delegación, quien gobierna es el representante (y no el pueblo: el representante no es el pueblo…; ni se le parece, como veremos).

2.- Por cierto que el ciudadano no vota a quien el cree votar, sino al que se presenta como aquel personaje al que el pueblo desea votar. No se vota a un personaje real, sino por una ficción elaborada por los gabinetes de imagen. Repito: no se vota a una persona tal cual es, sino tal cual es presentada, y que es presentada como el votante desea que sea. Se vota pues a un engaño o, como mínimo, a algo no verdadero…

(3) El representante (ya que aquí no hay mandato imperativo, ni derecho de revocación) podrá hacer lo que le dé la gana a el durante el mandato, o/y lo que le dé al Partido que lo presenta, o/y lo que le exija quienes les hayan financiado a el y al Partido. Por ello, es excepcional que el representante cumpla alguna vez lo que durante la campaña ha prometido.
Pero si el representante incumple, no existe sanción posible del ciudadano hasta el final del mandato (y de ahí la importancia del llamado “derecho revocatorio” de la Constitución Bolivariana de Venezuela; o bien la de la renovación parcial de las cámaras norteamericanas cada dos años) (*). Pero tampoco hay garantía alguna de que aquel que escojamos en lugar del representante rechazado, que la alternativa seleccionada no se comporte con la misma impudicia o infidelidad que el representante sancionado…

4.- Y es que nos engañan como a chinos más de una vez. Incluso la Revolución Francesa desemboco en la supresión de un engaño pero también en su sustitución por otros. En efecto: llevarse por delante un principio monárquico absolutamente demencial era anhelo tanto de burgueses como del pueblo llano. Y no pudiendo la burguesía sola con la empresa buscó el apoyo del pueblo… al que engañó posteriormente mediante tretas varias, pero con una en particular: la supresión del “Mandato Imperativo”. Hasta ese momento los representantes elegidos se debían a la voluntad de los electores, no pudiendo incumplir las promesas en virtud de las cuales habían sido elegidos y eso era el “Mandato Imperativo”. Ahora bien, tras lanzar al pueblo contra la monarquía, la burguesía no estaba dispuesta a compartir el poder con su aliado. Recurrió entonces a dos mecanismos: el 1º, la elección (pero ya el lector se habrá dado cuenta de que elección y elite -es decir no el pueblo- tienen la misma raíz); el 2º, alegar que el candidato representante de una circunscripción (pongamos por caso: Huelva) al resultar elegido pasa automáticamente a representar… a España entera con lo que:

a.) A Huelva que le den por saco en cuanto a sus problemáticas especificas y las promesas de campaña.

b.) Ahora el parlamentario “se debe al país entero” pero como en este hay intereses contrapuestos, pues que obre o bien según lo que le diga el partido (o sea, poco que ver con Huelva) o lo que le diga su conciencia (o sea sus bolongos… de clase). Así, quien sea candidato lo es para defender una provincia, pero quien ya sea representante solo se “debe” a la totalidad del país, un razonamiento como mínimo curioso…

5.- Otra limitación gravísima del sistema es que solo son votables los notorios. Quienes no son conocidos carecen de posibilidad de ser elegidos. Entonces solo caben las siguientes soluciones para ser votado:

a.) que sea personaje publico (porque se sea “hijo de” “famosillo” de la jet-set, célebre científico, asesino en serie, Gigoló “de Marca”, etc.…). Pero eso no es “pueblo”.

b.) que tenga “posibles” heredados para darse a conocer, es decir pagarse su campaña. Pero ser rico no es ser “pueblo”.

c.) que haya hecho fortuna, pero eso tampoco es común entre los mortales, y los sujetos súper “hechos a si mismos” suelen tener un “techo de cristal” o varios “gatos en la gatera”.

d.) que un partido le financie/ promocione la imagen/ la campaña… Solo que en este caso, hará lo que le diga el Partido, y no lo que le inspire/ diga el pueblo.

e.) que se vaya a parlamentar/ pactar con “el diablo”, es decir con el poder económico… el cual pondrá condiciones, la “letra pequeña”…

Caso practico emblemático: antes de las elecciones de 1979, se le ocurrió al PSOE que ya era hora de sustituir, en las conservas, la fecha de caducidad codificada (y, por lo tanto incomprensible excepto recurriendo al libro de códigos) por otra evidente (día, mes, año). Ante mi asombro, en el Comité Ejecutivo Nacional de Alianza Popular (luego PP), varios miembros se pronunciaron en contra de la propuesta socialista. Cuando, estupefacto, pregunté el por qué de dicha actitud, quien entonces se ocupaba de las finanzas del Partido me susurro en la oreja: “los grandes conserveros gallegos son financiadores nuestros…” Eso tampoco es “el pueblo”.

6.- Pero es que tampoco los candidatos como tales son reflejo el pueblo. Y no solo porque se trate de votar por los “mejores” (o sea los “superiores”, o sea no el pueblo) sino porque existe un sesgo evidente a la hora de “quien se presenta y a qué”. Y es que, obviamente, sólo se presentan a las elecciones quienes se creen superiores, especiales, capacitados para gobernar. Porque quien esté capacitado pero sea modesto o humilde no se suele presentar a las elecciones. Dicho de otra forma, los parlamentos no representan al pueblo, sino a su autoproclamada elite…

7.- Según la (errónea) teoría de la “Mano invisible”, esta dirige el “Mercado” para mayor “felicidad” de los ciudadanos (más o menos: el “egoísmo” de cada uno de estos últimos redunda en la “felicidad” del conjunto de la ciudadanía). ¿Podría ser que tanta falta de representación (o la mala representación) de los ciudadanos viniera compensada por unas cámaras en conjunto “compensatorias”, en conjunto “representativas”? Pues tampoco: vayamos a la cuestión de la abstención y del voto en blanco y nulo. No vamos a entrar aquí en las causas (múltiples) por las que la gente vota en blanco o se abstiene. Pero si que debemos referirnos al resultado. E insistir en que las cámaras no representan al pueblo, sino en todo caso a la parte del pueblo que ha votado. La parte del pueblo que no ha votado o que ha votado en blanco queda fuera de la representación. Lo cual tiene un efecto perverso sobre los gobernantes que creen (o hacen como que creen) representar y actuar en nombre de todo el país.

Y no hay duda de que muchos lo terminan creyendo de buena fe. Y, sin embargo, en cada Cámara, solo una parte del País esta representada. Soluciones varias: dejar vacíos los escaños que corresponden a la abstención y al voto en blanco, sobre todo para que los políticos sientan más humildad;

Segundo: restablecer el “mandato imperativo” a través del bolivariano “derecho de revocación” (o sea la posibilidad de destituir al Representante díscolo infiel o incapaz al inicio de la segunda mitad del mandato), o bien renovar las cámaras por mitad cada media legislatura.

En todo caso el pueblo esta muy lejos de todo este teatro. De toda esta “política espectáculo”. Casi felizmente para el.

(*) Lo de “los USA, primera Democracia del planeta” debe ser muy relativizado: pongamos como igual a cien la población norteamericana mayor de 18 años; la inscripción en el censo de población no es allí obligatoria, y se sabe que tan solo el 80% de la población mayor de 18 años se inscribe (o sea, estamos en el 80%).

Pero además, votar requiere la previa inscripción en el censo electoral, lo que hace tan solo el 80% del censo de población (nos hallamos ya en el 80% del 80%). Sin embargo, tan solo el 50% del censo electoral vota: nos situamos pues en el 50% del 80 del 80…
Y si el Presidente de los USA es elegido por el 51% de los Votantes (en la mejor de las circunstancias), en realidad le han votado el 51% del 50 del 80 del 80... del 100; O sea un 16-18% de la población mayor de edad. Téngase en cuenta, además, y en relación a esa arquetípica “democracia”, que votan habitualmente quienes pagan impuestos… pero no los pobres y los negros.
Jorge Verstrynge

miércoles, 27 de febrero de 2008

El pretendido fantasma de la abstención


El debate político gira estos días en torno a los partidos políticos. Pero no se habla ni del voto en blanco, eterno olvidado por los partidos (salvo por el Partido del Voto en Blanco), ni de la abstención, que queda proscrita como algo propio de individuos marginales, unos porque no les interesa la política (80% de los jóvenes), otros porque consideran que no sirve de nada votar, otros porque se oponen al sistema político y abogan por otra vía (anarquistas, antisistema, etc.) y otros muchos que son una mezcla de todos los anteriores.


Hay, por otro lado, teóricos que aprobando el sistema político parlamentario representativo, consideran necesario reflejar el porcentaje de abstención en el Parlamento. Es decir, si en unas elecciones se da un 30% de abstención, corresponde dejar vacío un 30% de los escaños del Parlamento. Si buscamos una explicación de esta teoría, encontraríamos la raíz en torno a la noción de soberanía. Bajo el supuesto de que un voto es igual a la soberanía de un individuo, en los sitemas políticos actuales de occidente, llamados democráticos, la soberanía es sólo ejercida cada X años (4 en nuestro país), por lo que se podría decir que los españoles sólo somos soberanos una vez cada cuatro años. Partiendo de esta base, el razonamiento sigue con la idea de que, una vez introducido el voto (nuestra soberanía) en la urna, no podremos volver a ser soberanos hasta la próxima legislatura. Pero, ¿y si no votamos? ¿Y si decidimos quedarnos nuestra soberanía? ¿No sería justo que si no entregamos esa soberanía nuestra al Parlamento, éste contara con una serie de escaños vacíos, como reflejo de que los representantes del pueblo no cuentan con el apoyo de todo el electorado? ¿No sería esta una buena manera de conseguir que los políticos se preocupen de una vez por todas por hacer más pequeña esa parte de la población que se abstiene, haciendo de verdad una política interesante para más personas, más cercana, etc., etc., etc?

Ya en Bélgica, país en el que es obligatorio el voto (bonita manera de prohibir la abstención), se creó un partido en las últimas elecciones (el partido NEEN!, es decir, ¡NO!) que lo que pretendía era mostrar legalmente el desencanto con las distintas opciones políticas. Dado que es obligado votar, al menos su objetivo sería dejar los escaños que consiga vacíos, como manera de simbolizar la abstención de la calle en el Parlamento. Como era de esperar, no tuevo de masiado éxito, pero todo se andará...

Contraportada: el Prozac es sólo placebo

Según una noticia publicada por el diario EL PAÍS en el día de hoy (http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Prozac/solo/placebo/elpepisoc/20080227elpepisoc_4/Tes), un estudio ha revelado que el famoso Prozac, fármaco utilizado por más de cuarenta millones de personas en el mundo, no es más útil que una simple pastilla azucarada. Su principio activo, la fluoxetina, produce el mismo efecto que tomar pastillas hechas con azúcar, es decir, placebo.

En el mencionado artículo, se cita a Javier Meana, director del Banco de Cerebros de Euskadi, que afirma que si en la consulta, al paciente se le dedica tiempo, se le explica qué ocurre, se le escucha y se le da una cápsula que no tiene nada, también obtienes un efecto terapéutico. Sin embargo, actualmente el sistema sanitario no dispone de tiempo, es más barato recetar que dar explicaciones.

Preocupante es también el hecho de que se estén recetando fármacos como el arriba citado no para combatir la depresión (su supuesta razón de ser), sino para aumentar la resistencia al estrés, como afirma Jerónimo Saiz, jefe del Servicio de Psiquiatría del Hospital Ramón y Cajal de Madrid.

Finalmente, leemos en el artículo que los estudios sobre antidepresivos (y sobre más cosas, se entiende) con resultados negativos no llegan a difundirse ya que no son publicados en las revistas científicas (sólo publican lo rentable). Tan sólo un 51% de los estudios registrados en la FDA (Food and Drug Administration) logran la aprobación de esta institución, sin embargo en la literatura médica, un 94% de los estudios muestran resultados positivos. Bochornoso.

¿Haremos caso ahora a Lou Marinoff, autor del famoso libro “Más Platón y menos Prozac”?

Estreno de sección: Contraportada

A partir de hoy, habrá una nueva sección en el blog, dedicada a comentar aquellas otras noticias de la prensa que no ocupan las primeras páginas de los diarios, pero que pueden resultar cuando menos curiosas.

¿Debate? ¿Qué debate?


"De qué sirve toda una vida de lucha política si nos tenemos que arrodillar ante las urnas en nombre del voto útil." Luís García Montero

En la noche del lunes 25 de febrero se retomó un viejo hábito de la época democrática española: el debate electoral. Todo, o casi todo en los medios de comunicación han sido aplausos y alabanzas hacia la celebración del mismo. Pero, ¿realmente se puede hablar de debate ante un acto en el cual todo lo que ocurre está previsto, los temas a tratar pactados, y los intervinientes están limitados a dos partidos prácticamente iguales, obviando y aislando a otras opciones como la de Izquierda Unida?

El debate del lunes fue en general aburrido, en ocasiones bronco y absolutamente superficial. Temas como la relación Iglesia- Estado ni siquiera se mencionaron. Qué decir de la forma de Estado, tema tabú se espera que todavía por algunos años más. Se habló de la noble decisión de retirar tropas de Irak y Zapatero autocalificó a España como un país de paz, pese a que seguimos formando parte de la OTAN y somos uno de los principales exportadores de armas.

Pero si analizamos los temas que sí se trataron, constatamos una señal más de la enorme falsedad que el llamado debate supone: el fondo importa poco o nada, todo queda en la forma y en esperar a ver quién se equivoca menos y quién es el vencedor del debate. ¿Qué importa quién ganó el debate si no se hizo ni una sola propuesta de futuro, y los temas tratados lo fueron abstracta y superficialmente? La alusión a la inmigración rozó la xenofobia, la política fiscal ni se tocó (ya se sabe que ambos partidos son idénticos en este ámbito), el terrorismo volvió a ser utilizado como arma arrojadiza sobre uno y otro, en vivienda ninguno de los dos propuso ninguna medida que ataque el problema de raíz, de política social mejor ni hablamos…

Pero lo interesante aquí no es entrar a valorar quién trató mejor uno u otro tema, ni quién ganó, ni quién no sabe qué es un bonobús. Si lo hiciéramos daríamos por válido el debate y las reglas en que se llevó a término. Lo relevante es: por un lado, el repugnante pacto de los dos partidos mayoritarios para censurar a IU e impedir un debate a tres bandas, tratando una vez más de instaurar de facto un sistema bipartidista en España, amparados por una ley electoral injusta de la que PP y PSOE no son los únicos beneficiados, e IU es el principal damnificado.

Por otro lado, el hecho de que lo único que se deja a la improvisación es el posible surgimiento de broncas o discusiones superficiales, pero siempre bajo el límite estudiado y pactado hasta el último detalle. Por lo tanto, más que un debate, lo que se vio por televisión fue la puesta en escena de un guión escrito a dos bandas con el objetivo de no destrozarse mutuamente, sino de dejar las cosas tal como estaban. Prueba de ello es que con seguridad la práctica totalidad de los votantes indecisos antes del debate, lo siguieran estando tras el mismo. Cada candidato barrió para su lado, y basó su discurso en aquello que los suyos querían oír (como ejemplo, Rajoy con el tema educativo exigió esfuerzo, mérito y autoridad del profesorado, y Zapatero con el tema del terrorismo siguió haciéndose la víctima frente a los desvergonzados ataques de Rajoy) y no tocó temas que podrían movilizar a otros, como por ejemplo, la relación Iglesia – Estado.

Por lo tanto, debemos ser cuidadosos a la hora de hablar de debate. Muchos son los que afirman que más vale lo del lunes que nada. Pero es que llevamos mucho tiempo conformándonos con males menores, ya sea en relación a debates, ya sea a la hora de votar en nombre del sagrado voto útil.

lunes, 25 de febrero de 2008

EL 1 DE MARZO NUEVA MANIFESTACIÓN POR LA VIVIENDA DIGNA


POR UNA VIVIENDA DIGNA. CONTRA LA CORRUPCIÓN Y LAS MENTIRAS ELECTORALES.

Volvemos a la carga. Una vez más tenemos que salir a reivindicar nuestros derechos mientras los políticos hacen oídos sordos y nos intentan convencer que trabajan para nosotros. No les creemos.Estamos cansados de sus promesas, de sus propuestas, de sus mentiras.Estamos cansados de sus espectáculos, sus falsos enfrentamientos, su avaricia de votos. Retransmiten sus debates y pretenden que nos mantengamos como telespectadores. Pero no queremos escucharlos en sus mítines, queremos que nos escuchen a nosotros en la calle. La vivienda es el principal problema de la sociedad y no vamos a aguantar más tiempo viendo como se ríen de nosotros . Hay que cambiar las cosas y hay que hacerlo ya. Por eso volvemos a la calle, por eso vamos a seguir saliendo hasta que la vivienda sea un derecho para todas las personas, tengan la edad que tengan.

El próximo 1 de Marzo nos van a tener que escuchar. http://www.vdevivienda.net/

Macromanifestación en todo el estado

Madrid – 18:00 en la Puerta del Sol.

Democracia registradora

Alberto Olmos
Diario Público

Los Estados Unidos, cada vez que terminar de aniquilar un país, comunican si intención de implantar en él la democracia; es decir, de abrir franquicias de McDonalds. La democracia no es, como dijo Churchill, el menos malo de los sistemas políticos, sino, como dirían en Torre Picasso, un modelo de negocio.

Yo no voy a votar el 9 de marzo y el principal motivo de mi absentismo no es la pereza de elegir entre varios placebos ideológicos, sino, curiosamente, que me paso el día votando. Votando de verdad; o sea, comprando cosas. Es incierto y populista afirmar que las elecciones son la fiesta de la democracia, y que los demócratas estamos llamados a las urnas. En el imaginario colectivo el concepto de democracia se asocia a un país donde uno puede consumir masivamente, y nunca a uno en el que se pueda votar. Votar al PSOE es irrelevante ante el dato de que ese mismo votante socialista habrá visitado El Corte Inglés cuatrocientas veces entre voto y voto, y que esas visitas transaccionales han influido más en el sistema que el entierro de una papeleta en el panteón electoral. Sin embargo, los medios no llaman nunca la atención sobre este hecho: que el consumo es el poder, mientras que ante unas en verdad intrascendentes elecciones generales tiran la rotativa por la ventana para hacernos sentir mal si el asunto nos importa un bledo, porque el verdadero motivo de que se vote los domingos es que las tiendas están cerradas.

Democracia ¿dónde? terrorista ¿quién?: el gesto de Antígona

Pablo Iglesias Turrión
Rebelión
-¿y, a pesar de ello, te atreviste a transgredir estos decretos?
Creonte
Hace más de cincuenta años Francisco Franco llamaba jaraneros y alborotadores a los estudiantes antifascistas de la Universidad Complutense. A los de mi facultad que el otro día recibieron con insultos a Rosa Díez se les ha llamado grupúsculos minoritarios y marginales, radicales, violentos y filo-terroristas. El profesor Antonio Elorza ha hablado de “internacional follonera” y de “fascismo rojo” para definirlos y Mikel Buesa llamaba la atención sobre la presencia de “personas sudamericanas” entre los estudiantes que reventaron el acto de la candidata de UPyD. Si esto último fuera cierto, se confirmaría que los tentáculos del vengativo comandante Chávez llegan al Campus de Somosaguas y todas las sospechas recaerían en el profesor Juan Carlos Monedero, conocido asesor del comandante, como cerebro gris del escrache a Rosa Díez (no puedo dejar de imaginarme a mi querido Juan Carlos leyendo a Boaventura de Sousa Santos en una celda de Soto del Real). Bromas aparte, parece que todo está permitido mediáticamente a la hora de criminalizar a los estudiantes de izquierdas. Sobre si son de una izquierda más o menos extrema, basta leer Destra e Sinistra de Norberto Bobbio para darse cuenta de que, desde la caída del muro de Berlín, la izquierda sólo puede ser extrema.A calor de los incidentes de políticas, el profesor Ramón Cotarelo escribía en su blog que este tipo de “agresiones” vienen siendo una práctica muy utilizada en los últimos tiempos. Como recuerda Cotarelo, la propia Rosa Díez y María San Gil hicieron sentir la presión del insulto al otrora presidente del PNV Josu Jon Imaz y todos nos acordamos del ex ministro Bono huyendo precipitadamente de una manifestación de la AVT. Peor les fue a los policías que detuvieron a los militantes del PP que intentaron agredir al ex ministro (entre los “folloneros”, como reconocerá Elorza, también hay clases y privilegios según a qué “internacional” o a qué “fascismo” pertenezcan) y peor todavía le fue a José María Fidalgo, cuya estatura le jugó una mala pasada cuando tuvo que afrontar las iras de los trabajadores de SINTEL (cosas del sindicalismo “de altura” cuando se enfrenta al de base).Pero ni esto ni las condenas contra los “ataques a la libertad de expresión” tienen gran importancia. Cuando los principales medios de comunicación están en manos de gobiernos o son directamente la propiedad de corporaciones privadas, reconocerán conmigo mis profesores que los escraches tienen una relevancia anecdótica en lo que a la libertad de expresión se refiere. En el caso de Rosa Díez, además, da la impresión de que, de no ser por el revuelo que su presencia despertó en el campus, no hubiera recibido mucha atención por parte de una prensa partidista que no tiene aún muy claro a quien va a restar votos la pintoresca candidatura de esta señora.Lo verdaderamente importante de los acontecimientos de la facultad complutense es la lección de Ciencia Política que dieron los estudiantes de izquierdas. Al intervenir contra un acto como aquel, los estudiantes fueron capaces de representar, con una intensidad inigualable, el No de Antígona en el que se fundamenta la ética en política, como acto radical de libertad que desafía las leyes y se opone a la tiranía, sean cuales sean sus consecuencias.Como rapeaban los Hechos Contra el Decoro (a través del mc de otro veterano de la facultad) cuando todo se puede decir, la forma de censura es el consenso. Este consenso que hemos vuelto a ver representado en las unánimes condenas contra los estudiantes es la forma de tiranía en la Tebas de nuestra postmodernidad demoliberal. Y eso es, precisamente, lo que han roto los estudiantes al corear “democracia ¿Dónde? terrorista ¿Quién?” frente a Díez, sus guardaespaldas y decenas de policías, asumiendo en un acto ético sin concesiones, una excomunión que ha sido refrendada por todos los creontes universitarios; desde nuestro decano Aldecoa (su sorprendente cercanía a la UDyP suponemos que debe responder, como nos reveló una fuente bien informada, a que nadie descuelga el teléfono en Ferraz cuando llama) hasta el marxista rector Berzosa, pasando por notables académicos, algunos de ellos muy cercanos a la generación de jaraneros y alborotadores del 56. Los estudiantes de izquierdas de la facultad de políticas, como ya hicieron hace un año al reclamar la puesta en libertad de Iñaki de Juana ante el escándalo general de la derecha y del centro, han repetido otra vez el gesto de Antígona. No debería hacer falta recordar que ello no presupone simpatía alguna con la violencia política, del mismo modo que Antígona no desconocía los crímenes de Polinices y, a pesar de ello, estaba dispuesta a hacer respetar el oikos. La lección de los estudiantes no está tanto en el hecho de reventar el acto de Rosa Diez (como decíamos, reventar actos es una práctica muy difundida últimamente) sino en que, con su gesto, han rechazado la trampa de la elección forzosa, el consenso tiránico de Tebas que da a elegir entre Rajoy o ZP, Pizarro o Solbes, con los demócratas o con los violentos. Como dice Slavoj Žižek en su Enjoy Your Symptom!, a Antígona le llamarían hoy terrorista.Fueron las clases de Ramón Cotarelo las que me hicieron ir al teatro a ver la obra de Sófocles y las que me permitieron comprender que sólo la libertad es tal si al gesto desobediente le sigue la expulsión de la comunidad política, como les ocurre siempre a los “extremistas”. Por eso John Rawls, Habermas y sus seguidores patrios de segundo nivel, desde ese centrismo del consenso que señala Perry Anderson en Spectrum, terminan estando siempre con Creonte, con las “intervenciones humanitarias” de la OTAN y con el consenso tiránico. Espero que estas palabras no provoquen que el bueno de Cotarelo tenga que volver a la cárcel —esta vez con Monedero como compañero de celda— por instigar indirectamente la violencia antisistema contra Rosa Diez, al recomendar la lectura de Sófocles en sus clases (aunque con los tiempos que corren, la posibilidad no es del todo descartable).Escribo esto desde la comodidad que otorga al investigador visitante una de las universidades más prestigiosas del mundo y, sin embargo, jamás podrá soñar Cambridge con un espacio de producción de conocimiento tan rico como nuestra facultad de Madrid. A pesar de los creontes complutenses, el gesto desobediente de los estudiantes de izquierdas ante el acto de Rosa Díez da mucho más de sí que los popular events en facebook, las student societies o los soporíferos clubes de debate de las universidades de élite británicas. Pueden estar orgullosos el decano Aldecoa y el rector Berzosa, están al frente de una de las mejores facultades de política de Europa, pero no deben olvidar que ello se debe, en gran medida, a los jaraneros y alborotadores de ayer y de hoy.
* Pablo Iglesias Turrión es Investigador visitante en la Universidad de Cambridge, candidato a doctor en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense.

viernes, 1 de febrero de 2008

Amén

El panorama político de los últimos días parece un gallinero. Por un lado los peperos, más allá de sus planteamientos ideológicos, están inmersos en una crisis interna que provoca vómito sólo pensar que puedan llegar al poder. Por otro lado, los "sociatas", ofertando reformas fiscales que destrozan el Sector Público y comprando votos a razón de 400€ por barba. Los nacionalistas llevan meses trazando estrategias para poder entrar en el gobierno de unos y de otros. Izquierda Unida, que parece de todo menos unida (por cierto, preciosa la nueva página web del candidato Llamazares: http://www.gasparllamazares.es, lo de los videos de supergasparín es para ir al baño y no echar gota), qué tiempos aquellos de Anguita... Entre todos, juegan a ver quién la tiene más gorda mientras no paran de mentar a la sacra madre del adversario.
Entre bastidores, por detrás de la escena, el Rey y su hijo el Príncipe, en un mes han celebrado sus respectivos aniversarios rodeados de felicitaciones (qué remedio, o les felicitas o callas, porque como se te ocurra criticar... Digo esto por 2 casos: el conocido de la portada del Jueves de hace unos meses que todavía trae cola, y otro que ha llegado a mis oídos de una supuesta suspensión el pasado sábado 26 de enero, de un debate del programa La Noria, de Telecinco, que iba a tratar sobre la Monarquía. Todo el mundo sabe que los programas de esa cadena escapan en ocasiones al buen gusto y a lo políticamente correcto, por lo que no parece descabellada la idea de la mencionada suspensión a "petición" de la Casa Real).



Pero si algo ha terminado de irritarme el seso, ha sido sin duda la actitud de la Iglesia en los últimos días. No contentos con haber sido una institución represora en el pasado, que ha bendecido dictadores a lo largo y ancho del planeta, que ha limitado y limita las libertades (físicas y morales) de tantas personas en el mundo, en el día de ayer sale el Portavoz de la Conferencia Episcopal (no Jiménez Losantos, sino el oficial Martínez Camino) haciendo pública una lista de instrucciones para votar si eres católico. Miren, no es que yo sea cristiano y me afecte directamente lo que dice o deja de decir la madre Iglesia. Sencillamente, me parece insultante que la Iglesia haya hecho lo que ha hecho, y todavía se sienta fuerte como para haber salido en manifestación varias veces durante la última legislatura y ayer anunciar a los cuatro vientos que un buen cristiano no puede votar a partidos que apoyen la expansión de los Derechos (en relación con los homosexuales) o la negociación con ETA. ¿Dónde está escrito que la Iglesia debe ser juez y parte en la configuración del ordenamiento jurídico? Conozco bien la Constitución española, y que yo sepa, en su articulado no se establece que estemos en un Estado cristiano, ni confesional, faltaría más (aunque por desgracia sí se reconocen privilegios a la Iglesia). ¿Y desde cuando la Iglesia ostenta el papel de especialista en conflictos con organizaciones terroristas? Y no hablemos del aborto, la libertad sexual, la educación para la ciudadanía, etc.

¿Ven? En eso sí que apoyo a Llamazares: hay que llevar a cabo un proceso de laicización total del Estado, comenzando por la ruptura del Concordato con la Santa Sede.

¡Crisis! ¡Horror! ¡Hecatombe!

Se veía venir. No cabe otra afirmación. Mucho antes de que aparecieran los primeros síntomas de desaceleración en Estados Unidos. El descontrol financiero, la mercantilización sin límites, el enorme desequilibrio entre valor real y valor de mercado, el crecimiento insostenible basado en la especulación sin que se de un crecimiento de la riqueza real. El capitalismo desbocado, en fin. No nos debe extrañar, ni amargar, la etapa de crisis que acabamos de estrenar.

No nos engañemos, los grandes beneficiados de la época de aproximadamente 12 años de bonanza económica que estamos dejando atrás, no somos la gente de a pie, sino aquellos que se ganan la vida especulando, negociando y corrompiendo para lograr la maximización de su beneficio individual. Son los que invaden Estados, los que sangran países enteros vaciando sus reservas de capital.


La calidad de vida lleva años en declive. Los salarios reales medios bajan (suben muchísimo los más altos y bajan los más bajos), crece la precariedad laboral, se hace necesario el pluriempleo, crece el número de esclavos del capital. La gente normal, la mayoría de la sociedad lleva años viviendo cada día más angustiada, más explotada y al mismo tiempo más dormida, y distraída con necesidades y bienes totalmente artificiales, mientras las élites del sistema amplían su beneficio.
A nosotros nos arrastrará la crisis, pero es que llevamos años en crisis para que las clases pudientes no lo estén. Hay que romper la baraja. No debemos caer en el desasosiego. Es el momento de movilizarse para dar la vuelta a los desequilibrios presentes, de salir a la calle a denunciar la subida de precios y el estancamiento de los salarios desde hace años(el salario medio a crecido este año muy por debajo de los precios, ¿alguien se ha movilizado por esto? Al parecer aquí lo único que importa es que España no se rompa por culpa de los separatistas, o que el rojo de Zapatero no se le ocurra dejar de hacer caso a la Iglesia). Cabe señalar aquí una paradoja a mi modo de ver sangrante, irritante e insultante: España lleva años siendo el país de la Unión Europea con mayor crecimiento. Bien, y ¿alguien lo ha notado en su salario? ¿Dónde está esa lluvia de millones? Recomiendo la lectura de un artículo de EL PAÍS del pasado mes de junio (http://www.elpais.com/articulo/economia/salario/real/medio/ha/bajado/anos/pese/fuerte/crecimiento/economico/elpepueco/20070624elpepieco_1/Tes) en el cual se afirma que el salario real no sólo se ha estancado, sino que ha descendido en los últimos 10 años - casualmente, los años de mayor bonanza económica-, caso único en toda la OCDE.


España se postula como principal candidato de Europa para liderar la crisis, que no se quedará en desaceleración, sino que debido a las características de su crecimiento (un crecimiento frágil, basado en la especulación inmobiliaria de los últimos años – en un artículo del Diario Público de ayer se afirmaba que desde 1998, se han construido en España el doble de viviendas de las necesarias-), tendrá que afrontar un período de recesión, es decir, crecimiento negativo y pérdida de riqueza. Ya lo señalaba Le Monde Diplomatique hace unas semanas, al afirmar que en caso de que Estados Unidos caiga en una tendencia especialmente negativa, España sería el país de la Unión Europea que más lo notaría, dada la fragilidad y virtualidad de su crecimiento de los últimos años, que además no se ha visto acompañado de una fuerte inversión desde Madrid, para tratar de reducir esa fragilidad.
Y mientras tanto, en el telediario nos preocupamos de si Aguirre y Gallardón se saludan o se lían a mamporros...